El café: una bebida que nos une

El origen del café se remonta a la región de Kaffa en Etiopía, en el este de África. Según la leyenda, fue descubierto por un pastor llamado Kaldi. Se dice que un día, mientras pastoreaba sus cabras, notó que después de que consumieran las bayas de un cierto arbusto, se volvían más enérgicas y activas. Intrigado, Kaldi probó una de las bayas y también experimentó un aumento de energía.

El café se hizo popular en la región de Kaffa y posteriormente se difundió a través del comercio y las rutas de caravanas hacia Arabia en el siglo XIII. Durante el Imperio Otomano, se estableció una próspera industria cafetera en el Medio Oriente. Desde allí, el café se expandió a otros países árabes y finalmente al resto del mundo.

En el siglo XVII, los europeos comenzaron a apreciar el café y su consumo se extendió rápidamente por todo el continente. Los Países Bajos, Francia e Inglaterra fueron algunos de los primeros países europeos en establecer cafeterías. En el siglo XVIII, la plantación de café se extendió a las colonias europeas en América y Asia, lo que permitió un aumento significativo en la producción y el comercio de café.

Hoy en día, el café es una de las bebidas más populares y se cultiva en países de todo el mundo, especialmente en América Latina, África y Asia. Ha adquirido un papel importante en la cultura y la economía de muchas sociedades, y existen numerosas variedades y métodos de preparación del café. Algunos prefieren la cafetera francesa, pero otros optan por la cafetera eléctrica.

Formas de preparación del café

Hay muchas variaciones y métodos para preparar un buen café. A continuación, te mostramos 3 métodos diferentes que se encuentran entre los más populares.

Cafetera prensa francesa

Si siempre te has preguntado cómo usar cafetera francesa, te comentamos que este método utiliza una cafetera especial que consta de un marco y un émbolo con un filtro de metal en la parte inferior.

Se añade café molido en la cafetera y se vierte agua caliente sobre él. Después de dejar infusionar durante unos minutos, se presiona el émbolo lentamente hacia abajo, separando los posos del café y dejando el líquido listo para servir.

Si deseas una cafetera francesa comprar, estarás adquiriendo un elemento doméstico de diseño elegante y que puede proporcionar gran sabor a tus bebidas. 

Café filtrado

Esta es una forma tradicional y común de preparar café. Para ello, se coloca café molido en un filtro de papel o metal y se vierte agua caliente sobre él. El agua se filtra a través del café y cae en una jarra o taza, dejando el café listo para ser consumido.

Este es el método que utilizan las cafeteras eléctricas para hacer café, por eso muchas necesitan de filtros de papel, aunque otras traen un filtro reutilizable incorporado.

Cafetera espresso:

Este método utiliza una máquina específica para preparar café espresso, que utiliza agua caliente bajo presión para extraer rápidamente el sabor y los aceites del café molido. Se carga café molido en el portafiltro de la máquina y se comprime ligeramente.

Luego, se inicia el proceso de extracción, donde el agua es forzada a través del café a alta presión, produciendo una taza de café concentrado y muy aromático. Este café es el más apreciado entre los amantes de esta bebida por su sabor intenso.

Una nueva forma de preparar tu café: con una licuadora individual

Preparar café en una licuadora portátil es una forma creativa y conveniente de disfrutar de una taza de café. Aquí te mostramos una forma básica de hacerlo. Asegúrate de tener una licuadora portátil limpia y en buen estado.

  1. Muele tu café en grano a una consistencia media-fina. Puedes ajustar la cantidad según tus preferencias de fuerza y sabor.
  2. Añade el café molido en tu mini licuadora portátil. La cantidad dependerá de la cantidad de café que desees preparar.
  3. Agrega agua caliente a la licuadora. La cantidad de agua variará según la intensidad deseada, pero generalmente se utiliza una cantidad proporcional de agua a café (por ejemplo, 1 taza de agua por cada 1 cucharada de café).
  4. Opcionalmente, puedes agregar azúcar, endulzante u otros aditivos según tu gusto.
  5. Luego, asegura bien la tapa de la licuadora para evitar derrames.
  6. Enciende la licuadora y mezcla durante unos segundos hasta obtener una mezcla homogénea y que el café haya adquirido la consistencia deseada.
  7. Detén la licuadora y verifica la consistencia y fuerza del café. Si es necesario, puedes mezclar un poco más o agregar más agua caliente si lo encuentras muy concentrado.
  8. Una vez satisfecho con el resultado, vierte el café preparado en una taza y disfrútalo de inmediato.

Es importante tener en cuenta que la licuadora personal puede generar espuma en el café debido al movimiento de la mezcla. Si no deseas la espuma, puedes dejar que el café repose por unos minutos antes de verterlo, permitiendo que la espuma se asiente y se separe del líquido. Recuerda también limpiar adecuadamente la licuadora portátil después de su uso, siguiendo las instrucciones del fabricante.

Disfrutemos de un buen café

Juntarse a tomar un café siempre es una razón de reunión y alegría. Esta bebida acompaña a los humanos desde hace siglos y siglos. Desde tiempos muy antiguos nuestros antepasados se han movilizado en torno del café haciendo por él largos viajes y exploraciones. Esta es probablemente una de las bebidas más famosas del mundo.

Hay distintos métodos para preparar un buen café. En esta nota hemos visto 3 de los más famosos: la cafetera de prensa francesa, el café filtrado y el expresso. También hemos visto un cuarto método más innovador: el café hecho con una licuadora portátil. Sea como sea que elijas disfrutar tu café recuerda que esta bebida siempre se acompaña mejor con amigos.

Por último, recuerda que el exceso de café o el consumo de cafeína en cantidades excesivas pueden tener efectos negativos. Todo en exceso hace mal y esta bebida no es la excepción. Ante cualquier duda consulta a tu médico.